La curiosidad de los vecinos
Los vecinos curiosos pronto empezaron a fijarse y a hacer preguntas. “¿Quiénes son esas personas?” Preguntó la Sra. Henderson por encima de la valla. “Sólo ayudamos a una familia necesitada”, respondió Robert, con la esperanza de desviar la conversación y evitar que siguieran indagando. “Parece que hay caos en tu garaje”, comentó otro vecino. “Todo va bien, de verdad”, les tranquilizó Robert, manteniendo la calma. Aunque proyectaba confianza, sabía que demasiada atención podía traer complicaciones, y tendría que manejar la situación con cuidado.

La curiosidad de los vecinos
Sucesos extraños
Los sucesos extraños empezaron a inquietar a Robert: los objetos de su casa se extraviaban misteriosamente y por la noche resonaban ruidos extraños. Una noche, vio sombras que se movían cerca del garaje y oyó ruidos sordos. “¿Qué demonios está pasando?”, murmuró, cada vez más inquieto. Decidido a descubrir la verdad, decidió vigilar más de cerca la zona del garaje, intrigado pero perturbado por aquellas señales inquietantes. Había algo que no encajaba.

Sucesos extraños